"Some people care too much i think it's called love..."

sábado, 10 de septiembre de 2011

Respira.Relájate.Para un segundo. Deja de preocuparte por los demás un momento. Mírate a ti misma, a tu interior, y deja de obsesionarte con estar perfecta. Empieza a ver las cosas importantes. Sabes que lo único que quieres es ser feliz. Y darte cuenta quiénes son las personas en las que de verdad puedes confiar. Y sobre todo, encontrar el amor. Y reír, llorar, bailar bajo la lluvia,como una niña pequeña, y olvidarte de todo lo que te hace daño, ser libre, conocer el placer de amar y ser amado. Pues párate un segundo y tan solo respira.
Quiero coger un avión, y despegar sin un destino fijo. ¿Por qué? Porque sé, que si voy a Roma, iremos juntos a tomar un helado mientras vemos la Fontana de Trevi; si voy a París, subiremos a lo alto de la torre Eiffel, mientras vemos toda la ciudad y manifestamos nuestro amor; si voy a Noruega, esquiaremos juntos y tomaremos chocolate caliente frente a la chimenea; si voy a Londres, sé que pasearemos por sus calles, y pondremos caras raras frente a los guardias del palacio de Buckingham, haciendo el tonto y riendo, cómo de costumbre; si vamos a NY, podremos ir de compras por la 5 avenida, y sé que me cogerás todas las bolsas que te quepan en las manos, y luego subir a lo alto del Empire State, mientras imitas a Kin Kong, cómo en aquella película, y haces cómo si me raptas, haciéndome prisionera de tu amor; si voy a Hollywood, sé que nos haremos la típica foto, con el gran letrero de fondo, y pasearemos por el paseo de la fama, mirando cada una de las estrellas buscando las de nuestros actores favoritos, o esperando encontrar alguna con nuestro nombre, haciéndonos los tontos, mostrando nuestro amor, loco, joven, vivo. En realidad me da igual cuál sea el destino, porque sé, que pase lo que pase, estarás en ese lugar esperándome, con los brazos abiertos, todo tu cariño, y completamente dispuesto a vivir la aventura de nuestras vidas, la aventura de nuestro amor.

domingo, 4 de septiembre de 2011

Aprovecha lo que tienes porque se te puede ir en cuanto menos te lo esperes. Por que ya a estas alturas me e cansado de estar jugando todos los días, de ayudar como una ilusa a alguien a quien le importo una mierda, de ser la compañera de lágrimas mientras me habla de otra y yo mientras ocultando mis sentimientos hacia él, de enamorarme y desenamorar me cada vez que me hagan daño, de llorar por alguien que no lo hace por mi y mucho menos preocuparme por alguien que no se para a pensar en mi ni un solo instante. Así que desde el día de hoy dejo de ser esa tonta enamorada de su voz, de su sonrisa, de sus ojos, de él, para volver a enamorarme de nuevo de alguien que llegue y haga que mi corazón palpite tan rápido que sea incapaz de contar los latidos.





martes, 30 de agosto de 2011


 Yo no soy rubia, tampoco tengo los ojos bonitos. Soy de las que cuando ven al típico chico que está bueno le tiro del brazo a mi amiga y cuando veo a un feo por la calle le digo mira tu novio. Soy de esas a las que se las gana con un par de palabras bonitas, y si es a la cara, aun mejor.
Hay dias en los que lo único que me apetece es sonreír, no buscarle fallos a nada, vivir todo tal y como venga, sin preocupación alguna, vivir con una sonrisa, como una niña pequeña. Canto en la ducha la canción más penosa del mundo, y arriesgo al máximo con los bordillos de las aceras. Necesito mi tiempo para todo, pero odio que los demás me hagan esperar.
Sí, yo soy también la que se equivoca todos los días, la que necesita llorar y gritar cuando tiene un mal día, a quien le vuelve loca reír hasta llorar con sus amigas, la que canta y baila, la que a veces salta por la calle sin pensar en nadie, yo soy quien sufre pensando en ti y la que aveces solo aveces te echa de menos, la que daría absolutamente todo por su gente, yo soy a quien le afecta todo demasiado, Sí, puede que no sea la persona más fuerte, más valiente o más decidida. Puede que me equivoque muchas veces, demasiadas quizás… 
Puede que me de cuenta de lo que quiero cuando ya no lo tengo, que mi lista de caprichos sea larguísima, que los malos momentos sean muchos, aunque los buenos los superen. Puede que complique lo fácil, puede que tropiece cien mil veces en la misma piedra, puede que me caiga, pero también sé que me volveré a levantar…